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Hallazgo de objeto misterioso asombra a los ecuatorianos

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Quito, 28 dic (La Calle). – A punto de finalizar el año, un grupo de ciudadanos en Quevedo se llevaron una sorpresa a encontrar en medio de una de las calles más concurridas una bolsa con una caja negra con seguro. La policía ha llegado al lugar y rápidamente han tomado la caja ante la mirada atenta de los curiosos. No han dado explicaciones.

Nuestras fuentes descubrieron que la caja fue llevada vía aérea hasta Quito. Ahora se encuentra en custodia del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, cuyo comandante se reunirá con el presidente Lasso para discutir el destino de la caja misteriosa…

Si llegó hasta aquí querido lector, permítame decirle Feliz Día de los Inocentes. Es el 28 de diciembre, el día donde todos gastamos bromas teniendo de fondo la matanza de los niños menores de dos años en Belén que se relata en la Biblia. No hay caja misteriosa, el misterio real será tal vez preguntarse que está haciendo el gobierno con nuestro país. El verdadero misterio será saber lo que nos depara el 2023.

Este día, como ya he dicho, gastamos bromas. Los medios hacen noticias en broma y luego advierten a sus lectores. No vaya a ser que la gente se asuste como sucedió en la narración de Orson Wells de la Guerra de los mundos en 1938 (ese no era el día de los inocentes que por cierto se celebra el 1 de abril en el mundo anglosajón) donde la histeria colectiva se desató. Los medios escriben noticias inventadas y en un mundo donde imperan las fakes news tal vez ya no nos sorprenda. Tal vez ya desconfiamos de lo que leemos, miramos y escuchamos. Ahora, como siempre, que los medios narran el mundo desde la mirada que les conviene o a la que se han adherido, aparece la desconfianza.

Sin embargo, el Día de los Inocentes nos permite retornar a la ficción. A ese espacio de la humanidad que tiene miles de años. Poder narrar sucesos inventados es tan humano como la lengua que utiliza para ese objetivo. Nos entretiene, nos da regocijo. Volvemos a reconocernos humanos en la ficción, en las bromas, en lo absurdo. Feliz día de los inocentes, queridos lectores. (MIB)