Quito, 27 nov (La Calle).- Durante la última reunión entre los presidentes de Ecuador y Colombia, Guillermo Lasso e Iván Duque, respectivamente, se anunció que la frontera entre ambos países se reabrirá desde el 1 de diciembre del 2021. La frontera permaneció cerrada durante 1 año y ocho meses, por la pandemia de COVID-19.
Sin embargo, los cuestionamientos no se han hecho esperar, específicamente porque por el diferencial cambiario del dólar frente al peso colombiano ha provocado una permanente fuga de capitales, en perjuicio del sector productivo y comercial del Carchi.
Además, el Gobierno Nacional de Colombia aprobó el decreto 1495 que establece que devolverá el IVA (19%) a los extranjeros, no residentes de ese país, que hagan uso de los establecimientos comerciales de Ipiales. La medida, adoptada el 19 de noviembre, considera este municipio como una unidad especial de desarrollo fronterizo con Ecuador.
Según el Gobierno colombiano, esta medida hace parte de las estrategias de reactivación económica. “Como el turismo fue una de las actividades más afectadas por la pandemia, trabajamos por su recuperación en varios frentes. Se trata de impulsar la reactivación económica, mediante el fomento de la actividad turística y el incremento de las ventas de los comerciantes del país”, indicó el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo de Colombia.
Las autoridades de Ipiales y Nariño mencionaron que, a partir del 1 de diciembre, los compradores podrán adquirir una gama más amplia de productos.
Sin embargo, en Ecuador, la situación es preocupante. Asambleístas por la provincia del Carchi manifestaron su inquietud por los comercios de la frontera, sobre todo, porque está cerca la época navideña, cuando se esperaba reactivar el comercio.
“Ante la proximidad de las festividades de navidad y año nuevo, el sector comercial de Tulcán, con mucha anticipación realizó una importante inversión en mercadería, previendo que el volumen de ventas en estas fechas, les permitiría equilibrar sus finanzas; para lo cual, se consideró las declaraciones de varias autoridades locales y nacionales, en las que anunciaban de la probable reapertura de la frontera, para el primer trimestre del próximo año”, expusieron.
También reiteran que el porcentaje de la población que actualmente se encuentra inmunizada, con dos dosis, es significativamente diferente a ambos lados de la frontera: pues, mientras en Ecuador alcanza el 80%, del lado colombiano, apenas está en el 42%; lo cual representa un alto riesgo de contagio para los ciudadanos ecuatorianos.
Ante esta problemática, platean al presidente Guillermo Lasso que considere la reapertura progresiva del Puente Internacional de Rumichaca, para el mes de enero de 2022; que se socialice, con la debida anticipación, en coordinación con las autoridades locales y representantes de los sectores sociales, económicos y productivos de Tulcán, los protocolos de bioseguridad que se aplicarán para la ejecución de esta medida.
Asimismo, piden que, de una vez por todas, se implementen medidas efectivas para la reactivación económica de Tulcán y la provincia, que incluyan: líneas de crédito a bajo interés y reprogramación de créditos con la banca pública, entre otras.
