Quito, 19 ene (La Calle).- El fiscal Darwin Muñoz fue notificado de su traslado al cantón Balao, en Guayas. Aseguró que esta decisión fue tomada “en represalia por decirle a la Fiscal que no aceptaba sus condolencias”.
»Estamos abandonados en el contexto de nuestra seguridad», dijo el funcionario, quien también fue amigo cercano del fiscal asesinado, César Suárez.
El fiscal señaló que no existían garantías de protección para cumplir con su trabajo. Cuando expresó su queja a la institución, al siguiente día recibió la notificación- desde la sede en donde trabaja la fiscal Diana Salazar- de su traslado administrativo a un cantón que queda a tres horas de su domicilio.
»No sé que se espera, a lo mejor que me quiten la vida en ese trayecto de esas horas desde mi casa al lugar que he sido asignado», resaltó en entrevista para NTN 24.
Públicamente dijo a la fiscal Salazar que si no se siente preparada para asumir la responsbilidad de garantizar la seguridad a los funcionarios que laboran en Fiscalía »debería dar un paso al costado».
De igual manera, familiares del fiscal Suárez denunciaron que el funcionario no tenía escolta pese al riesgo que corría. Según su testimonio, lo hicieron salir de su casa con una llamada, aparentemente inesperada, para que dirija a otro lugar. (AGM).