Icono del sitio La Calle

Exempleado de Google y Premio Nobel propone al socialismo como salida para la humanidad

Inteligencia Artificial

Tecnología para el bien común: Lo que Geoffrey Hinton propone desde una visión estratégica del socialismo

Cuando se habla de “socialismo” en el contexto tecnológico actual, no se trata de una postura partidaria ni de una bandera ideológica tradicional. Se trata de una estrategia de organización colectiva para que el avance tecnológico, particularmente la inteligencia artificial (IA), no quede secuestrado por intereses corporativos o elites reducidas, sino que se oriente transversalmente hacia el bienestar común y la mejora de la calidad de vida de toda la sociedad. Bajo esta óptica, el socialismo aparece como una propuesta pragmática para redistribuir el poder tecnológico y asegurar que el progreso no excluya a las mayorías.

Este enfoque ha sido respaldado por una figura destacada del mundo de la inteligencia artificial: Geoffrey Hinton, uno de los padres fundadores del deep learning y antiguo investigador de Google. Hinton, que recientemente se ha distanciado del gigante tecnológico por preocupaciones éticas sobre el rumbo de la IA, ha señalado que una de las únicas salidas viables para que la humanidad controle esta poderosa tecnología es adoptar formas de socialismo.

Hinton y su advertencia sobre el poder concentrado

En entrevistas recientes, como la concedida al medio CBS News y otras declaraciones públicas tras su salida de Google, Hinton ha enfatizado el riesgo de que la inteligencia artificial caiga en manos de unas pocas corporaciones o gobiernos sin supervisión democrática real. Según él, la acumulación del poder computacional, de datos y de capacidad de modelado en pocas entidades representa un riesgo comparable —o mayor— al de otras crisis históricas.

«Tal vez deberíamos pensar en modelos más cooperativos para gobernar esto. Tal vez un poco más de socialismo sería una solución para que esta tecnología no sea monopolizada por unos pocos», ha dicho Hinton en referencia a la necesidad de enfoques distributivos y éticos.

Este tipo de socialismo al que se refiere no implica estatizaciones masivas ni doctrinas rígidas, sino mecanismos de gobernanza democrática, redistribución de beneficios tecnológicos y control colectivo sobre los desarrollos más potentes de la IA.

El peligro de no actuar: desigualdad, desinformación y automatización sin freno

Hinton ha sido claro al afirmar que las IA avanzadas podrían amplificar fenómenos negativos si no son controladas: desde la desinformación masiva y las guerras algorítmicas, hasta el reemplazo laboral masivo sin planes de transición social. En su visión, solo una estructura cooperativa, equitativa y socialmente orientada puede mitigar esos efectos.

La preocupación de Hinton converge con las advertencias de otros expertos como Yoshua Bengio o Stuart Russell, quienes también han pedido gobernanza global y regulaciones con participación ciudadana. En este sentido, el «socialismo» al que alude Hinton puede entenderse como un sistema operativo político para la tecnología del futuro, donde los valores de equidad, transparencia y bienestar colectivo estén embebidos en los algoritmos que definirán nuestras vidas.

Salir de la versión móvil