Quito, 13 dic (La Calle).- El escritor británico y maestro del género de espionaje, John Le Carré falleció este domingo a los 89 años en un hospital de Cornualles, donde tenía su residencia, tras una corta enfermedad. Así lo informó la agencia literaria Curtis Brown.
“Con gran tristeza debo compartir la noticia de que David Cornwall, conocido por el mundo como John le Carré, falleció el sábado por la noche en Cornwall después de una corta enfermedad (no relacionada con COVID-19). Tenía 89 años”, dijo el CEO de Curtis Brown, Jonny Geller.
En el servicio de inteligencia
Su vida, al igual que sus obras, fue de lo más interesante. El Servicio de Inteligencia Exterior Británico lo reclutó cuando daba clases en el colegio privado de Eton, cuna del poder conservador en el Reino Unido. David Cornwell (su verdadero nombre) captaba, instruía y enseñaba a espías del otro lado de la cortina de acero a Occidente. Allí empezó a escribir y adoptó su famoso seudónimo.
Su primera novela se llamó Llamada para el muerto e introdujo a uno de sus más famosos personajes George Smiley. Metódico, inteligente, anodino en su vestimenta y en su fisionomía, en constante batalla contra su rival el agente soviético Karla.
El espía que surgió del frío, El topo, El honorable colegial o La gente de Smiley son parte de las obras que lo catapultaron como un maestro indiscutible del género de espionaje, popular en los años sesenta y setenta.
La Casa Rusia, El jardinero fiel o Un traidor entre los nuestros aparecieron durante los años después de la caída del muro de Berlín y el fin de la Guerra Fría, que demostraron su capacidad de producción literaria. En 2016, publicó su libro de memorias Volar en Círculos.
Vivió sus últimos 20 años en Cornualles, mientras escribía. Horrorizado por la Guerra de Irak y las noticias falsas sobre ella, acotó la siguiente frase “Las mentiras que se han difundido son tantas y tan persistentes que puede sostenerse en estos momentos que la ficción es el único modo de contar la verdad”.