Quito, 21 dic (La Calle). – Tras el desembolso de casi USD 500 millones del Fondo Monetario Internacional (FMI), el presidente Lenín Moreno debe cumplir algunas cláusulas. Una de ellas es la venta de las empresas que mayores ingresos dan al Estado.
El pasado viernes 20 de diciembre, el viceministro de Economía, Esteban Fierro, anunció que en el primer trimestre de 2020, el primer activo público en ser concesionado será la Hidroeléctrica Sopladora, que actualmente produce casi 250.000 megavatios por hora y que le costó a todos los ecuatorianos un total de USD 755 millones.
Otra concesión
La Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT) que actualmente brinda servicios como internet, telefonía fija, móvil y de televisión también inició su camino hacia la concesión.
En un acuerdo con la empresa Ernst & Young, la entidad prevé también vender el activo para que pase a manos privadas. La firma británica será la encargada de ponerle precio a una de las empresas que más le costó al país levantar después de casi caer en la banca rota en 2008 y que, hoy por hoy, es una de las más rentables.
Con ello, poco a poco, el FMI le va poniendo costo al país que ahora está vendido a sus beneficios.