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El presidente Lasso decreta estado de excepción en todo el territorio nacional

Quito, 18 oct (La Calle).- Durante un mensaje a la nación, el presidente Guillermo Lasso, decretó estado de excepción en todo el territorio ecuatoriano, como parte del Plan de Seguridad Nacional.

“Empezando de inmediato, nuestras Fuerzas Armadas y policiales se sentirán con fuerza en las calles, porque estamos decretando el estado de excepción en todo el territorio nacional, con especial énfasis en aquellas provincias donde los indicadores de violencia lo justifican. Para llevar a cabo controles de armas, inspecciones, patrullajes las 24 horas del día, requisiciones de droga, entre otras acciones”, explicó.

El mandatario aseguró que el Gobierno dará el respaldo necesario a las fuerzas del orden, para llevar a cabo la lucha contra el crimen. En este sentido, informó que crearán la Unidad de Defensa Legal de la Fuerza Pública. Esta entidad se dedicará exclusivamente a la protección de los miembros de la Policía Nacional y de las Fuerzas Armadas “que sean demandados por cumplir con su deber”.

“Ningún miembro de las fuerzas del orden tendrá que endeudarse para defenderse ante la justicia. La ley debe intimidar al delincuente, más no al policía. Actúen, señores integrantes de la fuerza del orden, con la valentía que los caracteriza. Este gobierno indultará a todos aquellos que hayan sido injustamente condenados por haber cumplido con su labor. Nuestros jueces deben garantizar la paz y el orden. No la impunidad y el crimen”, sostuvo.

De igual forma, Lasso dijo que el Ejecutivo enviará, en los próximos días, un nuevo proyecto de Ley dedicado a respaldar a los agentes del orden, denominado Ley de Defensa del Deber de la Fuerza Pública.  “Así el Gobierno Nacional desplegará, coordinará, protegerá, y unirá a todas las fuerzas del orden, para llevar a cabo una sola misión: devolver la seguridad a los ciudadanos. Juntos, en una sola fuerza, llevaremos la batalla al hampa donde sea que se esconda”, señaló.

Reiteró que, en los últimos años, el Ecuador pasó de ser un país de trafico de drogas a uno que consume drogas. Mencionó que esto se refleja no solo en la cantidad de droga consumida, sino en la cantidad de crímenes, que tienen relación directa o indirecta con la venta de estupefacientes.

“Cuando el narcotráfico crece, aumentan también los sicariatos y homicidios, robos a domicilios, vehículos, bienes y personas. De hecho, más del 70 % de las muertes violentas, que hoy ocurren en la provincia del Guayas, están relacionadas con el tráfico de drogas”, dijo.

El presidente indicó también que formaran un comité interinstitucional, entre los ministerios del frente social y la Secretaria de Derechos humanos, para establecer acciones concretas orientadas a prevenir, detener la adicción y reinsertar a consumidores en la sociedad.

Expresó su solidaridad por el fallecimiento de un niño de 11 años, durante un enfrentamiento armado entre delincuentes y la Policía, en un restaurante, al sur de Guayaquil.

“Somos un país diverso pero tenemos algo en común, queremos un Ecuador seguro para vivir tranquilos. Sin seguridad no hay desarrollo ni creación de oportunidades posible. Juntos, trabajando coordinadamente, venceremos. El cambio se concreta a través del encuentro, de la voluntad conjunta de todos los ecuatorianos para vencer a este enemigo común”, concluyó.