El infame teatro del trío Duque-Uribe-Moreno (opinión)

Por: Alexis Ponce

Puesta en escena A: Colombia

Acto 1:

La revista ‘Semana’ es comprada el 2019 por el grupo económico Gillinsky, que controla varios sectores de la banca y la economía, y en lo político es feroz filo-uribista. La línea editorial de Semana empieza a girar a la extrema derecha.

Acto 2:

‘Semana’ contrata el 2020 como directora a la periodista Vicky Dávila, abiertamente uribista que en 11 años ha promovido descaradamente a Uribe y la extrema derecha y que ha boicoteado los esfuerzos de PAZ del ex-presidente Santos.

Acto 3:

Mediante un tuit que levanta indignación, es conminado a renunciar el periodista de ‘Semana’ Daniel Coronell, aguda pluma editorial contra el paramilitarismo y la corrupción de Uribe.

Acto 4:

Renuncian masivamente a ‘Semana’ los mejores periodistas y editorialistas de Colombia: Antonio Caballero, Daniel Samper, María Jimena Duzán, tras asumir la dirección de la revista la comunicadora Dávila que promueve falsedades escatológicas a favor del cacique político narco-paramilitar Álvaro Uribe y contra todo lo que huela a ddhh, progresistas, izquierda o “socialismo” en Colombia.

Acto 5:

La línea editorial de ‘Semana’ cambia bruscamente para favorecer descaradamente al uribismo de extrema derecha, los grupos económicos, sabotear el logrado acuerdo de paz y alentar retornos a la guerra. Diario El País de España le cuestiona: https://elpais.com/internacional/2020-11-15/el-ocaso-de-la-revista-colombiana-semana.html

Acto 6:

La extrema derecha colombiana interviene descaradamente en las elecciones de EEUU en apoyo a Trump, realizando campaña mediática de terror psicológico contra “el socialista Biden” como falsamente lo llaman, masificando fake-news desde trolls center usados en una guerra virtual denigrante contra Joe Biden y Kamala Harris, acusándolos de “castro-chavistas que convertirán USA en otra Venezuela’. Por eso, senadores demócratas anticiparon que investigarán al uribismo y su campaña sucia en EEUU: https://contracara.com.co/sin-categoria/investigaran-en-eeuu-al-uribismo-por-campana-sucia-contra-biden/

Acto 7:

Cuando Biden asume la presidencia, el Departamento de Estado congela con cortesía a su punto más bajo la relación con la cancillería de Duque, cuyo embajador en Washington, el impresentable Pacho Santos (ex vicepresidente de Uribe) hizo campaña por Trump en ilegal delito de intervención, como lo hacen hoy en la campaña electoral en Ecuador. La prensa independiente de Colombia cuestiona a Duque el error de haber intervenido abiertamente en favor de Trump y augura pésimas consecuencias para Colombia durante el mandato demócrata. Ver: https://twitter.com/i/status/1347345737563205633 / Y:
https://www.lavanguardia.com/internacional/20201030/4977180292/elecciones-estados-unidos-derecha-colombiana-colabora-trump-caza-votos-florida.html

Puesta en escena B: Ecuador

Acto 8:

Como en el 2017 con ‘el Guacho’, se monta un operativo falso positivo de inteligencia y la revista ‘Semana’ publica un sensacionalista reportaje con similar matriz falsa e impone mediáticamente en Colombia y Ecuador un montaje de factura ya conocida en nuestro país en el 2009 con el caso de las tristemente célebres computadoras de las FARC implantadas por el ejército y la inteligencia de los “Falsos Positivos” de Colombia.

Acto 9:

En un vídeo impresentable filmado en selva ecuatoriana para cualquier analista serio, la extrema derecha colombiana lanza otra supuesta ‘computadora’, esta vez de un comandante del ELN al que mata el ejército de los “falsos positivos”. Como un muerto no puede declarar nada, se hace creer que él escribió que “financió la campaña del candidato Aráuz de Ecuador” al que Uribe con Duque, la inteligencia colombiana y el fiscal: amigo personal de Duque, declaran ‘objetivo a eliminar políticamente’ interviniendo descaradamente en las elecciones de otro país.

Acto 10:

Pensar que lo hicieron sin el previo aval y semáforo verde de Moreno, Jarrín y la extrema derecha ecuatoriana, resulta ingenuo o interesado. Como tampoco sucedió su intromisión en EEUU sin el aval de Trump y la extrema derecha republicana. A poco, Moreno se presta para una entrevista infame con la revista ‘Semana’ y anuncia que “se investigará y sancionará” sin recordar que, así mismo, la inteligencia colombiana enlodó a su “hermano flaco querido”, Gustavo Larrea, que posteriormente fue declarado inocente del montaje pero quedó emporcado hasta hoy con el apodo infame de “Comandante Juan”. Ha sido ya prendida la operación mediática, legal y política conjunta para echar lodo al candidato presidencial Aráuz y llevar el caso en redes sociales y grandes medios a través del terror informativo, el escándalo fake y la paranoia amarillista.

Acto 11:

Llega velozmente el fiscal de Duque al Ecuador, nada menos que en el propio avión presidencial ecuatoriano (que jamás ha volado para traer una sola vacuna, mientras otros países ordenan hasta vuelos de aviones comerciales llenos de vacunas para traerlas a sus pueblos, como Argentina); en tanto que, el país asiste en el CNE a momentos que jamás habíanse visto desde el retorno a la democracia. El fiscal, en enorme despliegue mediático, deja el montaje como “prueba” a la fiscal ecuatoriana que juega un papel semejante a favor de esta sucia operación. Llega a Quito rapidito luego de que el candidato presidencial acusado curiosamente gana la primera vuelta, pero jamás llegó nadie de fiscalía colombiana para dejar prueba alguna cuando nuestros 3 periodistas de El Comercio estaban aún vivos y en poder del ‘Guacho’ para luego ser sacrificados en aras de la Seguridad Nacional y de que no se indague qué pasó. Lo que se viene, dadas las evidencias empíricas de la conducta de Moreno, su fiscal y la inescrupulosa extrema derecha colombiana, es evidente. Pero eso ya merece un nuevo análisis de 4 escenarios futuros e inmediatos que los he reflexionado en una entrevista que sale publicada este domingo 14.02 en Radio La Calle.

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Acto 12:

A partir de hoy en cualquier momento uno de esos escenarios es encendido con los reflectores de los grandes medios y redes sociales: 1) el allanamiento a la vivienda de Aráuz con todos los medios acompañando; 2) la confiscación de su computador y los de su candidato vicepresidencial y hasta su jefe de campaña Santiago Díaz en medio de masiva presencia de canales y medios; 3) la detención provisional de Aráuz, aunque sea por minutos, en lo posible en la noche aunque sea liberado de inmediato u horas más tarde: lo esencial es que hay que tomarle fotos esposado como delincuente, en las unidades policiales y fiscales de Moreno y Salazar. Aunque un año más tarde se sepa que todo fue montaje y se le declare inocente; hoy debe ser sentenciado y juzgado social y mediáticamente como culpable. Y, finalmente, el escenario 4) quizás haya la petición de la Fiscal a los inefables del CNE para que anulen o sancionen la candidatura del ‘malhechor subversivo’ Aráuz y quede así libre el camino sin correísmo para una segunda vuelta entre el candidato que logre segunda votación y el que quede tercero. (Eso si Hervas no les impugna a su vez). La democracia está en el cuarto más oscuro: en el subsuelo. Ahí se está decidiendo qué pasará mañana, sin que les importe el riesgo de desatar violencias en todo el país, en plena pandemia.

El deber No. 1:

Acá no hay un Biden que ponga en su sitio a Colombia y los aparatos de inteligencia de Duque y Uribe. Pero si la fiscal Salazar es tan eficiente para todos los casos que son de prioridad política de Carondelet (no así con la pandemia ni las vacunas faltantes para el COVID y los bebés, motivos suficientes por lo que hace rato el criminalmente negligente Zevallos debió ser indagado por la fiscal), hoy debiera ser igual para atender una urgente y lógica petición que todo sector democrático de la sociedad civil, de derechos humanos, periodístico, feminista, laico, ambientalista y social, está en el derecho y deber de exigir: que ella investigue de inmediato las potenciales relaciones, apoyos logísticos, financieros y guerra virtual, potencialmente dados al PSC, CREO y la ultraderecha “libertaria”, uno de cuyos representantes, el Sr. Esteban Torres, que acaba de ganar elecciones en Tungurahua por el PSC, junto a otros agitadores de extrema derecha en entrevista a Diario El Universo el 8 de febrero de 2020, admite que mantienen contactos de coordinación con el presidente de Hungría, Viktor Orbán, acusado de neonazi, con Bolsonaro de Brasil, el partido franquista VOX de España y el agitador troglodita Agustín Laje de Argentina, todos de la peligrosa ultraderecha actual que apoyan material y propagandísticamente toda iniciativa conservadora en el continente; y, lo mismo, para que investigue la intervención y los alcances, financieros o de apoyo electrónico, de la “Internacional Liberal” con sede en España a un partido específico, pues consta públicamente la intervención de uno de sus líderes abriendo la campaña de 1ra. vuelta de su candidato presidencial en Quito: https://www.eluniverso.com/noticias/2020/02/08/nota/7729113/participacion-politica-electoral-ultraderecha-libres-alianza/

Todo esto lo analizo porque no puedo guardar silencio frente a lo que ocurre. No lo reflexiono por ser «correísta», que no lo soy. No lo hago por ‘política’ pues ni siquiera voto, porque tengo una familia vulnerable con cáncer y discapacidad de por vida y priorizo esas vidas sagradas, mientras cada minuto se contagia un ecuatoriano. Los fake news e insultos que se los traguen los nuevos ‘perros de Pávlov’ que babean odio en la red social. Lo hago porque tengo 32 años de experiencia y 55 años de vida y conocí de cerca, y fui directa víctima de las operaciones de inteligencia, propaganda y lodo fiscal, militar y mediático junto a otros defensores de ddhh, acusándosenos falsa y cínicamente de «ser de las FARC», con repetidas y numerosas acciones y oficios de Fiscalía y de tres gobiernos para que me presente a declarar por cualquier cosa, por asonada, subversión, terrorismo o por viajar a Colombia.

Jamás acepté y siempre desobedecí semejantes sucias maniobras. Sé perfectamente lo que están tramando y la paz de mi pueblo y la democracia deben defenderse. Si uno es demócrata acepta que gane el peor de sus enemigos. Pero Moreno, Uribe y las élites de Ecuador, antes prefieren incendiar este país. Por eso analizo y expongo estas reflexiones de forma pública.

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