Quito, 8 abr (La Calle).- El director encargado de la Dirección General de Aviación Civil (DGAC), Oswaldo Ramos, presentó su renuncia tras la filtración del documento que prohibía los vuelos a México de ida y vuelta.
La polémica desatada por las disposiciones emitidas por la DGAC dejaron en evidencia la falta de comunicación en el Gobierno Nacional. El oficio firmado electrónicamente por el subdirector Fausto Peñaherrera disponía la prohibición del arribo y salida de vuelos nacionales e internacionales desde y hacia México, incluyendo las escalas técnicas.
Luego de su difusión por los medios de comunicación, el ministro de Transporte, Roberto Luque, junto a la entidad correspondiente desmintieron el contenido del documento y atribuyeron su falsedad. No obstante, se comprobó que este escrito estaba registrado en el sistema Quipux.
Una hora más tarde el ministro Luque admitió la veracidad de este documento y aseguró que fue emitido “sin ninguna autorización”. Indicó que esta acción no tendrá ninguna validez y que pedirá la renuncia inmediata de los responsables. Tras esta situación, el director de la entidad dejó el cargo sin ninguna explicación. (AGM).