Quito, 3 oct (La Calle).- La fiscal general del Estado, Diana Salazar, denunció a Priscila Schettini y Angélica Porras, integrantes de Acción Jurídica Popular, por infracción electoral muy grave y violencia política de género, ante el Tribunal Contencioso Electoral (TCE).
La fiscal alegó que las integrantes de AJP «menoscabaron» sus derechos políticos y desacreditaron su imagen pública y capacidad intelectual a nivel nacional e internacional.
Según ella, las acusaciones y violaciones a las que fue sometida «no le permiten ejercer plenamente el cargo» y en igualdad de oportunidades que sus compañeros.
«Me causa sufrimiento y, también a mi madre, hija, hermana y demás miembros. Ha impactado además de forma negativa a mi salud de acuerdo a lo que dicta la Organización Mundial de la Salud (OMS)», argumentó.
El pasado 20 de septiembre de 2023, el TCE conoció el proceso y sorteó al juez Fernando Muñoz Benítez para que lleve el caso. Sin embargo, Benítez se encuentra fuera del país, por lo que la denuncia debía ser atendida por el juez subrogante, Richard González.
Sin embargo, González también forma parte de AJP y presentó una excusa para no participar y se mantiene pendiente.
AJP alertó de un supuesto plagio en la tesis de la fiscal y creo una veeduría en el Cpccs para que el caso sea atendido. Tiempo después el Honorable Consejo de la Universidad Central del Ecuador (HCU) alegó que Salazar solo habría cometido «impericias» en su proyecto de titulación. No obstante, una comisión internacional aseveró que la máxima autoridad de la FGE habría cometido tres tipos de plago en su tesis.
Salazar contra todos
El 16 de junio, Salazar inició una investigación contra González por supuestamente difundir información reservada.
El magistrado indicó que la información reservada por la que se lo investiga es la convocatoria a rendir la versión y que, hasta el momento, no se ha concretado.
“Ese documento está en la cartelera del TCE. Señora, no puede confundir esa petición con un testimonio o examen. Todos sabemos que son dos cosas diferentes”, mencionó.
Además, Salazar junto a su madre pusieron otra denuncia al colectivo por el supuesto delito de odio. Schettini mencionó, para Radio La Calle, que el origen este nuevo proceso se debería a la denuncia que el colectivo presentó por el supuesto plagio de la tesis de Salazar. Según ella, los mensajes que surgen en redes sociales, a partir de esa denuncia, no le parecen y culpa a los miembros del colectivo. (N.J.C)