Quito, 01 ene (La Calle). – 2021 es un año de cambio. El 24 de mayo, un nuevo gobierno se instalará en el Palacio de Carondelet y Lenín Moreno y su gabinete abandonarán el poder Ejecutivo. El reto de los ecuatorianos es evitar la amnesia social y cobrar las cuentas pendientes de este gobierno. Así lo analiza Luis Molina, abogado y asambleísta asilado en México.
“El reto del próximo gobierno será poner en la Constitución el derecho a la verdad. El derecho a la verdad establece la necesidad de que el sistema de administración de justicia sanciones, investigue, pero también entregue una reparación a las víctimas de las violaciones a los derechos humanos es fundamental para el próximo gobierno. En la medida en que los ecuatorianos exijamos al gobierno el derecho a la verdad podremos tener una restructuración de la justicia”, explicó a Radio La Calle.
Deuda pendiente
Exigir respuestas sobre los casos de corrupción y violación de los derechos humanos no es el único reto para el 2021. EL siguiente gobierno deberá analizar la deuda que este gobierno contrajo con organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Interamericano de Desarrollo o el Banco Mundial.
Hasta 2025, según el FMI, Ecuador deberá pagar USD 40.220 millones de deuda pública. Este año, nuestro país tiene un déficit fiscal de USD 7.700 millones, según el ministro de Economía, Mauricio Pozo. Para cubrir ese vacío, Ecuador deberá endeudarse más.
“Un gobierno responsable deberá crear un Comité de auditoria de la deuda. Recordemos que la constitución establece que la responsabilidad judicial del manejo de la deuda resulta imprescindible. Todavía hace falta determinar el pago de la deuda legítima e ilegítima. Establecer procesos de moratoria y de priorización del pago de la deuda social sobre la deuda externa”, explicó Molina.
