Quito, 15 oct (La Calle).- En medio de tensiones entre China, y Estados Unidos, un acorazado-destructor de misiles estadounidense cruzó, el 14 de octubre, el estrecho de Taiwán.
En un comunicado, la portavoz de la Séptima Flota de la Armada de EE.UU, Renan Mommsen, señaló que el destructor de misiles bajo la guía del USS Barry, de acuerdo con la ley internacional, cumplió con un trayecto rutinario por el Estrecho de Taiwán.
Según la vocera “el tránsito a través del Estrecho de Taiwán demuestra el compromiso de Estados Unidos con un Indo-Pacífico libre y abierto”.
Las tensiones aumentan
A pesar de las denuncias por parte del gobierno chino, EE. UU, a través de las famosas operaciones de “libertad de navegación”, continúa fortaleciendo su presencia militar en dichas aguas. Además de fortalecer sus relaciones con Taiwán en el ámbito armamentístico, también es su principal y más poderoso aliado.
Este movimiento por parte de EE.UU provoca inestabilidad, pues China considera a Taiwán parte de su territorio. A pesar de que Taiwán tiene su propia bandera y moneda, la ONU no reconoce como una nación independiente.
Respuesta china
Mientras que China, a través de un portavoz militar del Comando del Teatro Oriental del Ejército chino indicó que “EE.UU últimamente ha estado enviando señales erróneas, comprometiendo la estabilidad y la paz”.
Además advierten a Estados Unidos que detenga cualquier intención que ocasione problemas en la región. De hecho, el pasado 12 de octubre, algunos medios de comunicación informaron que la Casa Blanca emitió una solicitud al Congreso estadounidense para que se apruebe nuevas ventas de armas especialidad a Taiwán.
A lo que Pekín reaccionó y advirtió “actuar de manera necesaria y legítima”, y dijo que, con esta venta, Washington estaría violando el principio de una sola China. El 13 de octubre, Xi Jinping, presidente chino, volvió a llamar al Ejército de su país a “prepararse para la guerra”. (AH).