Quito, 3 oct (La Calle).- La oportunidad de que los candidatos a la Vicepresidencia del país expresen sus propuestas y opiniones a los ciudadanos son limitadas. Hasta el momento, solo en 2021 se realizó un diálogo parecido.
Carlos Yaguachi, coordinador nacional de Comunicación del Consejo Nacional Electoral (CNE), y Wilson Benavides, asesor político de la institución, señalaron para Radio La Calle, que este proceso se podría realizar siempre y cuando exista una reforma al Código de la Democracia.
El artículo 202 manda que los únicos debates obligatorios serán con los aspirantes a la Presidencia, Alcaldía y Prefecturas en jurisprudencias con más de 100 mil electores.
Yaguachi resaltó que la propuesta debería venir de la sociedad civil o la Asamblea Nacional para que se pueda reformar la organización de los debates. Añadió que en esa alternativa deberían participar otras dignidades.
«El CNE actúa de acuerdo a lo que la ley le permite y autoriza. Para iniciar, la norma debería ser expuesta por otros actores», dijo el funcionario del CNE.
Otros países sí lo hacen…
Benavides comentó que en otros países donde sí se realizan estos encuentros políticos, los candidatos a la Presidencia y sus compañeros de fórmula pertenecen a diferentes movimientos o partidos políticos.
Añadió que, a lo largo de los años, el ‘vice’ ha ocupado una figura «decorativa» que ha mostrado un papel casi irrelevante, salvo en crisis políticas. «A diferencia de otros países, donde el diseño institucional muestra otro panorama y tiende a formar coaliciones», aclaró.
Además, las fuentes concuerdan en que se necesita más participación y voluntad de los actores políticos y opinión pública para considerar ambos debates.
«Es indispensable que la ciudadanía vaya creando una cultura de debate y eso hay que trabajar con medios de comunicación, sociedad civil y una cooperación internacional para generar conciencia», apuntó Yaguachi.
Reforma al presupuesto
El coordinador del CNE explicó que, aunque el país es joven en materia de debates electorales, el mecanismo generaría un acercamiento con los candidatos.
«Solo ahí los ciudadanos pueden conocerlos, saber qué proponen, quiénes son y por qué los están eligiendo», refirió.
No obstante, mencionó que eso implicaría una nueva reforma al presupuesto que se destina al debate presidencial. Tanto Benavides como Yagauchi aseguraron que se necesitaría una preparación y análisis diferente para que no se vulnere ninguno de los eventos.
Además, destacaron que las universidades, medios de comunicación y organismos de la sociedad civil deberían generar estos espacios con apoyo o asesoría del CNE.
«Si la entidad no tiene la capacidad de realizar una inversión tan importante, dependerá de los costos que realicen otras empresas», finalizó Yaguachi.
El único y solitario debate
En las elecciones de 2021, el grupo Faro junto a otras instituciones organizaron un debate con los candidatos a la Vicepresidencia, donde solo asistió el representante de la RC, Carlos Rabascall. Según la entidad, el aspirante de CREO, Alfredo Borrero se excusó para no asistir.
El «diálogo político» -como lo llaman los expertos- tomó las recomendaciones de la sociedad y trató tres bloques:
- Empleo, salud, pobreza y educación;
- derechos humanos, seguridad, género, lucha contra la corrupción y cambio climático, y;
- refuerzo de sus argumentos.
