Quito, 17 nov (La Calle). – La Corte Nacional de Justicia negó el 16 de noviembre, el recurso de casación solicitado por Jonathan C., un pastor evangélico condenado por el secuestro extorsivo que tuvo como resultado la muerte de Juliana Campoverde.
A través de este recurso, denominado “extraordinario”, el religioso quería anular la sentencia de 25 años que pesa en su contra. Sin embargo, al no ser admitido su pedido, la sentencia entró en proceso de ejecución. Eso, según el Código Penal, significa que agotaron los recursos legales para cambiar el fallo.
Con la ratificación de la sentencia, también queda en firme la orden de clausura de la iglesia Oasis de Esperanza, ubicada en el sur de Quito, pues en este lugar Juliana participaba en el coro y el victimario ejercía como su líder.
En la resolución, el Tribunal de primera instancia, dispuso al Ministerio de Gobierno la búsqueda indefinida de los restos de la joven y ordenó que se implemente un plan de recompensas en Quito para recopilar datos que ayuden a dar con su paradero. En ese mismo fallo, la autoridad llamó la atención “por su falta de eficiencia en la administración” a los fiscales generales que estuvieron entre el 2012 y 2018.
Proceso judicial
En este caso, la justicia sentenció al pastor sin haber hallado el cuerpo. Sin embargo, a través de sus propias versiones, admitió que el 7 de julio del 2012 abordó a Juliana, quien entonces tenía 19 años y se la llevó a un motel. Según el religioso, tuvieron una discusión y la mató accidentalmente.
Los defensores de la familia Campoverde presentaron 35 testimonios, pruebas documentales y pericias. Todas las pruebas se validaron. Los abogados del pastor llevaron a cuatro testigos. El pasado 11 de junio del 2020, la Corte de Pichincha rechazó la apelación de pastor evangélico, pero el sentenciado interpuso el recurso de casación que fue inadmitido este lunes 16. (DC).