Quito, 10 ago (La Calle). – El movimiento Construye deberá elegir un nuevo candidato presidencial que reemplace a Fernando Villavicencio, asesinado por sicarios la tarde de ayer, 9 de agosto, después de un mitin de campaña en el colegio Anderson, al norte de Quito.
El Código de la Democracia, en su artículo 112, manda que si un candidato o candidata fallece antes de las elecciones, la organización política que lo auspicie podrá reemplazarlo por otro candidato del mismo partido, movimiento o alianza.
Sin embargo, el rostro de Villavicencio estará en las papeletas electorales, debido a que ya fueron impresas. Los votos del político asesinado se validarán para el nuevo candidato.
La ley solo permite cambiar la cara del candidato fallecido cuando las papeletas no han sido impresas.
El Código no menciona plazos para designar al nuevo candidato, pero se entiende que deberá hacerse antes del 20 de agosto de 2023, día de las elecciones anticipadas. Por otro lado, el reemplazo de Villavicencio deberá ser un hombre, dada la obligatoriedad de la paridad de género en los binomios presidenciales.
La exlegisladora Ana Galarza, ahora candidata a la Asamblea por Tungurahua, dijo para Radio ¡99 que analizan los perfiles para del sustituto. Si bien Construye deberá nombrarlo, se sabe que el movimiento de origen que apoyaba a Villavicencio es Gente Buena, por lo que se deduce que la «alianza» decidirá en conjunto.
«Estamos analizando todo este tema jurídicamente, pero sobre todo los perfiles. Tiene que ser alguien afín y comprometido con la lucha y visión de Fernando. Tiene que ser su continuación», sostuvo.
El movimiento Construye, más recordado como Ruptura de los 25, es liderado por la exministra de Lenín Moreno, María Paula Romo, entre otros funcionarios del mismo periodo como Juan Sebastián Roldán.
