Quito, 22 jul (La Calle). – De las canciones relacionadas a Guayaquil, tal vez la más representiva sea Guayaquileño madera de guerrero, un pasacalle de la autoría del maestro Carlos Rubira Infante. Utilizado en campañas políticas y en las fiestas de la ciudad. Esta canción tiene un curioso origen.
En su muro de Facebook en 2014, el mismo Rubira Infante contó la historia de la canción. «Lo que pasó fue que alguien se expresaba con un poco de odio al guayaquileño. Como eran hinchas de un equipo de Quito no nos trataban bien a los guayaquileños», explicó el cantautor.
En ese momento Rubira era profesor de coro en Quito (1948) y uno de los alumnos le contó del incidente. «Había un partido de fútbol y un alumno mío, de un coro al que daba clases, me fue a decir: «A su tierra la están tratando mal señor Rubira».
El respondió: «Les dije que Guayaquil era la Perla del Pacífico, una gran ciudad que quiere a su capital, y les hice entender eso. Entonces salió la letra de la canción, pinté al guayaquileño amplio, sincero, valiente en toda la extensión de la palabra».
“He querido acabar con el regionalismo, escribiendo una canción para cada provincia, como una carta geográfica musical”, confesó Rubira al escritor Jorge Martillo en el 2007, en una entrevista para diario El Universo.
Rubira compuso pasacalles, sanjuanitos, albazos, valses. Entre sus obras emblemáticas se encuentran Esposa, En las lejanías, Chica linda, Playita mía, entre otras. MIB
