Quito, 9 de agos de 2021, (La Calle).- Un consejero político, dos económicos y dos sociales.
Ya son cinco los funcionarios que trabajan junto al presidente Guillermo Lasso, bajo el membrete de “asesor ad honorem”.
Al inicio del gobierno, el 24 de mayo, nombró a Aparicio Caicedo, como una especie de “gran asesor” en temas políticos, luego a uno para la lucha en contra de la desnutrición y otro para asuntos relacionados con la vacunación.
Terminada esta etapa, Lasso nombra entre los meses de julio y agosto, dos asesores, el primero para políticas relacionadas con el producto agrícola de exportación más significativo del país, como es el banano y otro para fortalecer las alianzas público privadas.
Preguntas pendientes
¿Quién toma cuentas de estos funcionarios si se encuentran bajo un esquema ad honorem?
¿Qué roles han tenido hasta el momento?
¿Qué papel ha cumplido Carlos Cueva González en el desarrollo del programa de vacunación?, en fin, entre otras dudas.
Los asesores “especiales” no brindan entrevistas. Son poderosos fantasmas y el despacho presidencial es el lugar de sus apariciones.
Cronología inversa:
-El 5 de agosto, Roberto Salas Guzmán fue nombrado consejero de gobierno ad honorem de inversiones y alianzas público privadas. “Esta designación no implicará remuneración ninguna, ni estará sujeta a régimen laboral de ningún tipo”.
-El 20 de julio designa al expresidente del Congreso de la época de Mahuad, Juan José Pons, para la consejería ad honorem de políticas públicas para el sector bananero.
-En el decreto 31 del 24 de mayo nombra a Luis Enrique Coloma Escobar, como consejero ad honorem para el desarrollo de política públicas en la lucha contra la desnutrición infantil.
-Ese mismo día es nombra Carlos Cueva González como delegado para el desarrollo del programa de vacunación del Gobierno.
-Aparicio Caicedo recibe, también, el cargo de asesor ad honorem, sin especificar mayormente sus funciones, se habla de que tendrá responsabilidades de asesoría política y el seguimiento al plan de Gobierno.
