Quito, 05 nov (La Calle). – 1.012 presos de los pabellones 6 y 7 fueron trasladados en la segunda fase de reubicación en la Penitenciaría del Litoral durante el 4 de noviembre. El Servicio Nacional de Protección a Privados de Libertad (SNAI) señaló como objetivo recuperar la “gobernanza integral y garantía de los derechos” de los reclusos.
«Dentro de la requisa no encontramos armas de fuego. Tenemos la dinámica de siempre: celulares, sustancias sujetas a fiscalización, armas blancas. Aparte de otros objetos denominados prohibidos», expresó el comandante de la zona 8, Víctor Zárate.
Aunque se escucharon detonaciones dentro de la prisión, las cosas no escalaron a los enfrentamientos. En total se han reubicado a 2.431 internos en la ‘Peni’. Una parte de los reclusos se trasladó hacia la cárcel de El Rodeo en Manabí, y otra al centro de rehabilitación Guayas N°4, también en Guayaquil. Una primera fase, miembros de las Fuerzas Armadas requisaron cientos de municiones, armas de fuego y explosivos.
La resistencias de las bandas delictivas, de acuerdo con el SNAI, produjeron enfrentamientos con policías, guías y militares. Además, la reacción de los grupos delincuenciales al traslado llevó a colocar bombas en coches en distintos lugares de Guayas, Esmeraldas y Santo Domingo.
Terror en Manta
La alerta falsa de una amenaza de bomba y una presunta balacera en la playa el Murciélago en Manta llevó a los espectadores de un concierto a abandonar el lugar en medio del pánico general. (MIB)