Quito, 12 mar (La Calle).- Cinco de las niñas demandantes en el Caso Mecheros fueron retenidas en Cascales, en Sucumbíos, al ser liberadas esta madrugada fueron retenidas nuevamente en el Chaco, en Napo. Allí permanecieron varias horas, según la alerta de la Alianza de Organizaciones por los Derechos Humanos.
»La Policía Nacional y los militares no nos permitieron el paso para llegar a Quito para asistir a un foro y a una marcha que se realizará en diferentes lugares de la ciudad», dijo Leonela Moncayo, una de las niñas demandantes.
Frente a la negativa de las fuerzas del orden, las cinco menores de edad (Skarlet, Dennise, Mishell, Dannya y Leonela) realizaron un plantón en la calle e impidieron el paso vehicular en forma de protesta.
»Espero que el presidente esté escuchando esto y se le pase por la cabeza que ya deje de estar vulnerando nuestros derechos como personas», expresó Dannya.
Posteriormente, en horas de la madrugada fueron detenidas en este cantón y al ser liberadas volvieron a ser detenidas en Chaco. Cerca de las 09h00 la Alianza DDHH informó que ya se permitió el paso de dos de los cuatro buses retenidos y denunció el hostigamiento de las fuerzas del orden a las niñas.
La respuesta del gobierno
A finales de febrero habitantes de las comunidades amazónicas acudieron a la mesa parlamentaria de Biodiversidad a denunciar la falta de cuidado ambientales a su territorio.
A la sesión acudieron cuatro de las nueves niñas demandantes del Caso Mecheros, quienes informaron que el Estado no ha cumplido con la sentencia de la Corte Constitucional para eliminar estos instrumentos contaminantes en las diferentes zonas afectadas. En este sentido, la respuesta de la ministra de Energía, Andrea Arrobo, generó gran descontento.
”No se dejen manipular, escuchen y eleven su voz, pero no se dejen manipular”, dijo la titular a las niñas de la Amazonía.
La funcionaria informó que se cerraron 2 mecheros en 18 meses y que la cartera de Estado ya cumplió con la sentencia. Sin embargo, actualmente hay 486 mecheros encendidos. Las declaraciones de Arrobo generaron descontento e indignación en la comisión ya que ese no sería el número de mecheros que afectan a la comunidad.
”Esto ha sido un atropello, ella no sabe ni lo que está hablando, no sabe ni sumar ni restar (…) que quede en la conciencia de ustedes la muerte de tanta gente”, dijo una de las niñas entre lágrimas. (AGM)