Por: Sebastián Jarrín
Entramos en una semana para determinar los candidatos y candidatas a distintas dignidades. Varias incógnitas surgen: ¿será Otto candidato; y si lo es, ¿quién lo auspiciará? ¿Decidió ya el PSC si correrá con uno de sus propios cuadros, o lo hará con Alvarito? ¿Quién será el candidato/a de la Revolución Ciudadana; participará Correa? ¿Qué pasará con Iza y Vargas una vez distanciados de Pachakutik? Y por último ¿qué haremos con tanto candidato?
Nebot pateó el tablero cuando anunció que no participaría de esta ni de ninguna futura elección, aunque más bien pareció decir “no necesito de cargos de elección popular para manejar el poder”. Sin él, los liderazgos a la interna del partido no son lo suficientemente fuertes como para disputar la Presidencia. Otto sonaba como su mejor carta, ahora incluso dicen haber conversado con Álvaro Noboa. En otras palabras, si Otto les dice que no, escogerán entre capturar el voto #YaQueChucha o presentar a alguien del partido, lo que en ambos casos significa no pasar de primera vuelta.
Entonces ¿qué hará Otto? Recordemos que Esteban Torres, desde su movimiento Tiempo de Cambio en la Alianza por la Libertad (de corte ultraderechista), propuso como candidatos de la Costa, a Otto Sonnenholzner y Alberto Dahik, y por la Sierra, a Luis Fernando Torres y César Montúfar. Montúfar participará por su lado con Villavicencio a la Asamblea; pero Otto debe decidir aún. Se ha mostrado como el político que no quiso serlo y el candidato que no quiere serlo, sin embargo, tiene los números – según algunas encuestas – con el apoyo correcto podría ser el candidato de un grupo de poder pro FMI.
Lasso es un caso particular pues, autodenominado candidato desde que surgió CREO y acompañado de un think tank (Fundación Ecuador Libre), pasó de ser una alternativa en 2017 a la imagen de los memes #YaQueChuchas. Sin embargo, acumuló espacios de poder durante la “Alianza por la Gobernabilidad” con Moreno, entre ellos la Función Electoral, ya demostró con Ángel Torres que es capaz de usarlo para suspender a sus rivales. Podría en el trámite de las primarias de CREO convertirse en el candidato que justifique su derrota alegando un fraude.
Pachakutik llega a sus primarias divididos tras el anuncio de que Iza y Vargas retiran sus candidaturas, pues PK le hace el juego a la derecha. Aunque quieran disfrazarlo como el “único movimiento con discusión interna”, eso son pugnas de poder entre la dirigencia (derechizada) y las bases mas consecuentes con un proyecto político. Ahora Iza y Vargas estarían en busca de un partido que los auspicie o si no piensan participar, habría un electorado sin representación en la papeleta que tendrá que decidir por quién votar.
RC llega con un 20% de votantes aproximadamente, a partir de lo cuál solo puede subir. Con la dispersión actual del voto, ese 20% le alcanza para llegar a segunda vuelta, donde entonces sí o sí tendrá que llegar a acuerdos si quiere lograr el 50+1 de votos. También podría dar la sorpresa de llegar a un consenso político con Iza y unificar esfuerzos, que incluso me atrevería a decir, otorgarían una victoria en primera vuelta.
Así llegan a primarias y todavía quedan preguntas por responder: ¿podrá participar Rafael Correa? ¿habrá elecciones? ¿De no haberlas, reclamaremos como ciudadanía o callaremos? Si las hay, ¿por qué, por quién y cómo votaremos?