Quito, 6 mar (La Calle).-Pasadas las 11 de la noche de ayer, Carmen Romero Reyes abrió la puerta de su vehículo y se arrojó a la calzada. Hoy ese acto decidido, oportuno y arriesgado la tiene con vida después de un intento de asalto y secuestro la noche del último viernes en Quito.
Diez minutos antes, Carmen había tomado un taxi por el sector de El Inca. Poco después de arrrancar, una mujer oculta en el puesto del copiloto dejó su lugar y se colocó a su lado, hicieron lo mismo, dos hombres ocultos en la cajuela.
Carmen fue vejada, golpeada y hasta le dieron a tomar escopolamina. Los asaltantes la llevaron al cajero y luego a su residencia ubicada frente al terminal de Carcelén, norte de Quito. En el trayecto, como relata su hija Karen, recibió varias llamadas suyas, a las que Carmen solo respondía con monosílabos.
A las 23h16, el taxi entró en su conjunto y la obligan a entrar a su domicilio para que les entregue otros bienes, como joyas y un vehículo Chery Tiggo Rojo, placa PCZ 7310, propiedad de la familia. Veinte minutos después, aprovechando que el vehículo baja la velocidad para pasar un rompevelocidades, Carmen se lanza desde el asiento del copiloto, (video)
Ha pasado un día, nos cuenta Karen, y hasta el momento han recibido ya la asistencia de la Policía que busca a los delincuentes, al parecer todos de nacionalidad ecuatoriana. Ella está todavía con un fuerte shock nervioso, además tiene heridas producto de su acción valiente.
A nivel de redes sociales, el video que ustedes ven aquí se está difundiendo con la intención de recuperar el vehículo robado.