Por: Alexis Ponce / defensor de DD.HH.
COBO SE VA SIN PENA NI GLORIA
GARZÓN ENTRA EN PLENA MASACRE
LASSO REINCIDE EN NOMBRAR MILITARES
1. Ayer se fue el coronel Fausto Cobo del SNAI (Cárceles) apenas a 66 días de posesionado. A lo Mae Montaño, casi. Prometió el primer día en el cargo que, a los 6 meses, solucionaría el grave problema carcelario y acabaría con las mafias y motines.
2. El primer día de posesionado le advertí al leer su primer tuit público, tan virulento, que así no solucionaría nada mientras no cambiase dos cosas inmediatamente: el modelo de las Mega-Cárceles de Lasso, herencia de Moreno, Correa y Pepe Serrano. Y el Código Penal de la Fiscal y la Justicia a la ecuatoriana que hacina a los más pobres hasta el infinito dejando una sola cárcel flojita, para «los bacanes»: la cárcel 4.
3. Le dije en tuit de respuesta ese primer día: dialoguemos. No quiso, no respondió o tuvo temor de afrontar a un defensor de derechos que lo supo defender cuando él estuvo preso tras los sucesos del 21 de enero del 2000.
4. Y se fue el coronel Cobo a la ex Senain (Inteligencia). Pero ni él, ni los aparatos de Inteligencia, ni la SNAI, ni la ex-Senain no pudieron detectar, sin embargo, absolutamente nada del nuevo motín y su correspondiente baño de sangre con que hoy día se bautizó al flamante nuevo director de cárceles. El pobre ni apareció: en su lugar, como el conservador Nebot gobernador de León Febres en los ’80, emergió mediáticamente fuera de la mega-cárcel de Guayaquil, Pablo Arosemena, el neoconservador gobernador de Lasso, citando que «ya controlaron» el desorden y «sofocaron» el desangre, pero ya cuando murieron más de veinte presos y volaban cabezas de 5 decapitados.
5. Así recibió el encargo de Lasso un nuevo militar: el coronel Bolívar Garzón. Motín brutal este día, con 40 heridos, 20 y pico de muertos, y 5 decapitados, en una de las mega-cárceles cuyo MODELO generará siempre más masacres y mafias porque ese modelo, como en Brasil, El Salvador o Venezuela (las peores cárceles del mundo) alienta el control del territorio carcelario y las disputas por él. Así como nada cambiará el mero enfoque militar policíaco, tan curuchupa, que no va a ningún lado que no sea a más masacres y más control carcelario por parte de las mafias.
6. Lo volví a insistir (¡ni qué brujo!) en mi entrevista a Ecuador Today hace dos semanas, cuando anuncié nuevas masacres al estilo etapa de Lenin Moreno, debido a la incompetente terquedad del régimen continuista, en intentar solucionar con militares y policías en retiro, lo que debe solucionar con equipos multidisciplinarios al estilo del ejemplar sistema penitenciario nórdico y con el apoyo de la única mujer hindú que logró lo imposible: humanizar el infierno.
¿Cuántos decapitados más necesitará Lasso para darse cuenta?