Quito, 21 dic (La Calle).- En un trágico suceso que ha estremecido a Praga, un individuo armado abrió fuego en el edificio de filosofía de la Universidad Carolina, cobrándose la vida de al menos 15 personas y desatando el pánico en uno de los peores tiroteos masivos registrados en la República Checa.
El atacante, un estudiante del campus, ejecutó el mortal tiroteo sin que se revele aún su identidad, sumiendo a la comunidad universitaria y a la ciudad en un estado de conmoción y horror.
El ministro del Interior checo, Vit Rakusan, declaró que, hasta el momento, no se sospecha que el ataque tenga vínculos con alguna ideología o grupo extremista. Esta declaración busca calmar la preocupación pública y descartar cualquier conexión ideológica detrás del trágico suceso.
Sin embargo, la incertidumbre sobre las motivaciones del atacante persiste, dejando a las autoridades en una búsqueda activa de respuestas.
Las autoridades siguen en busca de potenciales amenazas
El jefe de policía de Praga, Martin Vondrasek, confirmó que el tiroteo ocurrió en el edificio universitario y que el tirador era un estudiante, aunque no proporcionó detalles sobre las víctimas ni sobre el posible motivo detrás del ataque.
Las autoridades evacuaron el edificio y están llevando a cabo una exhaustiva búsqueda en el área, incluido un balcón desde donde se realizó el ataque, en busca de posibles explosivos. A pesar del caos inicial, la respuesta rápida y coordinada de la policía y los servicios de emergencia refleja un esfuerzo por salvaguardar la seguridad pública.
El presidente checo, Petr Pavel, expresó su conmoción por el suceso y extendió sus condolencias a los familiares de las víctimas, marcando un día sombrío en la historia de la ciudad.
JR
