Quito, 1 abr (La Calle).- El asambleísta exPachakutik, Bruno Segovia, dijo que Guadalupe Llori debe «dar un paso» al costado y no esperar a que sea destituida, además expresó que no ha podido denunciar los intentos de conversaciones entre él y asesores del gobierno.
Segovia, sostuvo que fue contactado por un asesor de la presidencia por medio de Whatsapp, pero no aceptó. «YO no acepté porque no tenía interés y tengo mi posición bien clara.» Además, expresó que no pudo denunciar este acto pues hay un «peón» en la Asamblea Nacional que no les permite hablar.
«Lastimosamente tenemos un peón en la presidencia de la Asamblea Nacional, nos negó la oportunidad de la palabra. Como no nos da la palabra en el Pleno, lo hicimos a través de la Comisión de Fiscalización.»
Además destacó que no ha pedido ni ha recibido un centavo. El presidente de la República debe dar nombres de quienes han recibido favores. «Esto no es al azar, están hablando de puestos, de algún funcionario del ministerio que estuvo autorizado para hacer ese tipo de transacciones».
Más adelante recalcó que Guadalupe Llori tuvo una confrontación con la prefecta de Orellana, Magali Orellana, por el reparto de cargos dentro de diversas instituciones de la provincia. «Eso suele hacerse no estaba seguro, con las declaraciones del presidente y verificando los nombramientos compruebo que si. Esto viene a la palestra y le decimos al presidente, cuente todo.»
Segovia recalcó que, no ha tenido silencio cómplice. «Las cosas que he conocido en su momento las he denunciado, debido a la trascendencia y corroborando que efectivamente es así y fue una conversación en el despacho de la señora, pero yo probaré con los nombramientos.»