Quito, 29 ago (La Calle).- El periodista del medio digital La Posta, Andersson Boscán denunció seguir siendo blanco de persecución estatal y de grupos delictivos. En el programa Café La Posta, Boscán detalló nuevos elementos en el caso del asesinato de Rubén Chérres, involucrado en el caso «El Gran Padrino».
Anteriormente Boscán huyó del país debido a supuestas amenazas de muerte en su contra y de su familia. Estas amenazas habrían venido de grupos criminales. El día de hoy, el periodista denunció que Fiscalía abrió una investigación contra el medio digital La Posta, por «delitos económicos», tomando como prueba un video de la red social TikTok.
Denunció que una simple llamada anónima bastó para que Fiscalía abra la investigación contra el medio por lo cual anunció que el Gobierno los está persiguiendo. Explica que esta ‘fuente’ acusó a Boscán y a Luis Eduardo Vivanco de delitos económicos.
El periodista tachó esto como un «atentado a la libertad de expresión». Además, reveló que solicitaron asistencia penal internacional frente a la celeridad del caso a cargo de la fiscal Ivonne Proaño. «¿Cual es el delito dra. Proaño, que investigamos al que le dio la orden?», cuestionó.
El seguimiento a la Posta estaba en el celular de Cherres
Asimismo, se reveló audios donde se escucha a Rubén Cherres referirse al medio y al periodista Boscán. De acuerdo a las interpretaciones, Cherres pretendía contratar sicarios para silenciar al periodista debido a sus investigaciones sobre él y Danilo Carrera.
Es por este audio que se sabe que habría un atentado hacia Boscán, Fernando Villavicencio (+) y el coronel de Policía, José Luis Erazo. Por ello también se realizó un parte policial del 1 de abril de este año donde se alertaba de los posibles atentados criminales.
Boscán detalla las pruebas de la persecución en su contra
Andersson relató que, en el celular de Rubén Cherres el día que lo encontraron asesinado, existían fotografías de su persona. Explicó que habían 31 fotografías tomadas cerca del domicilio, el vehículo y oficina del periodista. De acuerdo a él, es «todo lo que necesita un sicario».
Mafiosos estaban al tanto de los movimientos de Boscán y su familia en Quito, hecho del que tenía conocimiento el fiscal y perito de la unidad de delitos transnacionales, Jorge Cuasapaz, quien lo desestimó. Boscán denunció que ninguna autoridad que sabía de esto le informó que la vida de él y su familia estaban en riesgo.
Cuasapaz informó (extraoficialmente) al equipo de Boscán que por una orden superior, no abrirán una investigación por los seguimientos en su contra. Por ello es que afirma que el Gobierno encubre a quienes persiguen a miembros del medio La Posta.
Además, aseveró que la documentación sobre los casos de Cherres, Villavicencio o relacionados a la trama de corrupción con el Gobierno, tienen carácter de reservado. Boscán dijo que los periodistas de su medio que tuvieron acceso a esas investigaciones, firmaron acuerdos de confidencialidad. Una muestra de que las instancias estatales pretenden ocultar información o censurarla, en palabras de él.
La reacción de la Fiscalía ante las acusaciones de Boscán
En un comunicado publicado en la red social X (twitter), la Fiscalía General del Estado (FGE) indicó que la información revelada por Boscán está fuera de contexto y que fue «obtenida de forma irregular». En la imagen no hay referencia alguna a la investigación contra Boscán o el medio de comunicación.
En la respuesta no se expresa como tal el rechazo a las declaraciones del periodista. El comunicado señala puntualmente que la FGE expresa su «profunda preocupación» y que las investigaciones mencionadas en la emisión de La Posta, son públicas. Es decir, la institución desmintió que estas son reservadas al público o a los medios de comunicación.
También desmintió que el parte policial del 1 de abril consta en el expediente fiscal. Es decir, ese parte no conforma el expediente. «(…)Dentro de la verdad procesal no existe» puntualizó. A ello agregó que las investigaciones del asesinato de Cherres y Villavicencio se desarrollan de manera separada.
Actualmente, Boscán y el medio afirmaron haber tomado medidas cautelares ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y haber denunciado los atentados contra la libertad de expresión del Gobierno ante el Alto Comisionado de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para la protección de periodistas.
«Llévenme para satisfacer la sed de venganza de un Gobierno corrupto que está de salida», subrayó Vivanco refiriéndose a la Fiscalía hacia el final de la transmisión de Café La Posta en YouTube.
