Quito, 06 may (La Calle). – El Ministerio de Justicia de Bélgica confirmó que no dará seguimiento al pedido de extradición contra el expresidente Rafael Correa. Además se negará a “cooperar con la justicia ecuatoriana” en el marco de procesos políticos. Así lo informó el defensor internacional del exmandatario, Christophe Marchand. El país europeo reconoció que los procesos penales en contra de Correa fueron contrarios al derecho a un juicio justo. Ese antecedente llevó a entregarle el estatus de refugiado político en Bélgica.
Según Marchand, “cualquier autoridad independiente que examine lo que sucede en Ecuador se da cuenta de la manipulación de la justicia que tiene lugar con fines políticos. El grupo de abogados Ius Cogens también explicaron que la Interpol se negó a emitir las notificaciones rojas solicitadas por Ecuador. La razón es “la apariencia de flagrante denegación de justicia y del carácter político del caso”.
Además, el relator especial sobre la Independencia de Magistrados y Abogados de las Naciones Unidas, Diego García Sayán, ha denunciado en diversas ocasiones “las graves violaciones de la garantía de la independencia del poder judicial. También el carácter injusto” del denominado “caso Sobornos” que sentenció a Correa y otras 20 personas.
La posición de Bélgica aparece tras declaraciones del canciller Juan Carlos Holguín, quien expresó que el proceso de extradición se solicitará a pesar del asilo político que tiene Correa. La Cancillería sería el medio para llevar a cabo este objetivo.
Caso Sobornos
En 2021, el expresidente fue sentenciado a ocho años de prisión por el caso Sobornos dentro del delito de cohecho. Un tribunal declaró a Correa como autor mediato de este delito y dispuso la pérdida de los derechos de participación por 25 años a todos los condenados, es decir, Correa no puede participar en una elección hasta 2046. MIB