Autoridad transfóbica: «8 de marzo solo con mujeres genéticamente constituidas» | Opinión

por Alexis Ponce
Defensor de derechos humanos

La señora del vídeo anexo que me envió mi hija Karina Rashell de ALFIL, se llama Brith Vaca; y es concejala de Quito y fue vicealcaldesa encargada de la capital ecuatoriana. Recuerdo que, semanas atrás, en un debate virtual conmigo, en un programa online al que nos invitaron a los dos, dijo ser defensora de derechos de las mujeres.

No la conocía hasta entonces, sino ese instante y en el debate no mencionó muestras de transfobia que tienen algunas gentes que dicen defender derechos humanos de las mujeres y hasta llamarse feministas. Ser transfóbica y a la vez ser defensora de derechos de las mujeres, es como ser racista y «defender» afroecuatorianos e indígenas pero sólo aquellos que sean «quimicamente puros».

La señora del vídeo anexo que me envió mi hija Karina Rashell de ALFIL, se llama Brith Vaca; y es concejala de Quito No la conocía hasta entonces, sino ese instante y en el debate no mencionó muestras de transfobia que tienen algunas gentes que dicen defender derechos humanos de las mujeres y hasta llamarse feministas. Ser transfóbica y a la vez ser defensora de derechos de las mujeres, es como ser racista y «defender» afroecuatorianos e indígenas pero sólo aquellos que sean «quimicamente puros».

Antes he mencionado en foros y entrevistas, mi cuestionamiento frontal a los discursos y prácticas de transfobia que desde 1997 detectamos en varios gays y lesbianas, incluso algunos de sus dirigentes históricos. He cuestionado por igual la transfobia enfermiza vista en funcionarias públicas encargadas del tema derechos de las mujeres en varias instituciones del Estado. He cuestionado por igual a defensores de derechos humanos que también cometieron transfobia. Y he cuestionado que organizaciones trans hayan apoyado al señor Pedro Freile el legionario de VOX en Ecuador. Como si un judío apoyara el neofascismo. Y hay de esos casos en el mundo.

En ese debate virtual con Doña Brith, que lo publiqué en mi censurada red y wasap, recuerdo que confrontamos desde el inicio en casi todos los temas del programa virtual al que fuimos invitados: «Resultado de las elecciones en Quito».

Cuando cité a la perdedora ultraderecha VOX de España con el candidato legionario Freile, se indignó, intentó protestar y se le puede oír diciendo «Pedrito» en el vídeo. Cuando cité que Quito con dignidad debe manifestarse para defender a la capital y al país de la narco-banca en el poder, movilizándose como en 1997, 2000 y 2003, para que sean destituidos ‘los albaneses’, defendió la permanencia de Lasso lo mismo que lo hizo el programa, y pueden oírla en el audio-vídeo que menciono. El delito de odio político e ideológico se expresa igual en el enfermizo ataque tipo 4 desaparecidos pelagatos a lo que denominan «correísmo».

Bueno, me vengo a enterar ayer que en sesión del Concejo municipal de Quito por el 8 de marzo, Doña Brith es que advirtió que esta fecha es un día sólo de las mujeres «biológicamente constituidas», de nadie más.

Por transfóbica, «¡toma tu maduro!» como dice el pueblo. Cuestiono su visión transfóbica, excluyente y neo-conservadora. Puede serlo, pero siendo autoridad local, debe estar consciente de que toda autoridad no puede convertir en política pública ni en discurso público, su religión o su (esa sí) ideología -curuchupa- de género.

Doña Brith: usted no puede desconocer derechos e identidades diversas. Por lo visto, usted no se enteró que en 1997 logramos Ellas y nosotr@s, con Ellas, con las mujeres que según usted no son biológicamente constituidas como tales, logramos insisto, con las mujeres trans, la histórica Despenalización de la Homosexualidad en el Ecuador. Hay que superar el lenguaje y las creencias que fácilmente, desde un espacio público, pueden ayudar a desatar el Discurso y Delito de Odio y deteriorar una situación social y cultural adversa a la vida, integridad física y derechos de las mujeres trans. Ellas están siendo asesinadas nuevamente en el país de forma impune. Todo discurso que aliente exclusión, es automáticamente un discurso de odio.


«Biológicamente» humanista y «genéticamente» marxista.

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