Quito, 21 nov (La Calle).- Pablo Arosemena, ministro de Economía y Finanzas, renunció al cargo. El equipo de comunicación de la cartera de Estado confirmó la dimisión del funcionario, pero señaló que trabajará hasta mañana, miércoles 22 de noviembre, último día del gobierno saliente de Guillermo Lasso.
Según su carta de renuncia, Arosemena puso a disposición su cargo el pasado 15 de noviembre y agradeció al primer mandatario por la confianza depositada desde julio de 2022. «Una visión clara: orden fiscal y enfoque social. Ha sido un gran honor ejercer esta responsabilidad en su gobierno», reza el escrito.
En su carta enumera nueve logros de su administración en la economía y finanzas públicas.
- La culminación de un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), con el que «financió inversión social».
- Reducción y eliminación de 19 tipos de impuestos y aumento de la recaudación tributaria.
- «Pago de deudas históricas» a gobiernos autónomos descentralizados, al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social y a las universidades.
- Ejecución de la mayor colocación de créditos productivos desde la banca pública.
- Focalización de subsidios a los combustibles.
- Renegociación de la deuda pública con China.
- Canje de deuda por conservación de las Islas Galápagos.
- Reducción de la deuda pública.
- Gestión y contratación de créditos con multilaterales que serán desembolsados desde 2024.
Su legado, una economía en ruinas
El 2023 culminará con un déficit fiscal aproximado a los USD 5.000 y con estimaciones de crecimiento económico desalentadoras, según datos del Banco Central del Ecuador.
Para mediados de septiembre de 2023, la previsión de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) fue del 1,5 %. El 2022, el país cerró con un crecimiento del 2,9 %, una evidente tendencia a la baja, reportó Primicias.
En cuanto a la deuda pública, en diciembre cerrará con un total de USD 81.000 millones, tomando en cuenta préstamos externos, colocación de bonos de deuda interna, pasivos y obligaciones pendientes de pago, reseñó diario La Hora.
Respecto a la inversión extranjera, el régimen se encargó de ahorcarla con un riesgo país superior a los 1.800, una cifra que ahuyenta a los inversionistas.
Cabe mencionar que estos son solo algunos de los problemas que arroja la gestión de Arosemena. Hasta el momento los gobiernos provinciales y municipios exigen las transferencias correspondientes para pagos de salarios de sus servidores; así mismo, el IESS continúa con su deuda histórica y las universidades piden sus presupuestos y cese a los recortes económicos.
