Quito, 16 ago (La Calle). – El presidente Guillermo Lasso parece tener un lado socialista y de ‘Robin Hood’. En su discurso de entrega de los créditos de las oportunidades enfatizó que «tiene sentido quitarle los subsidios a los ricos para dárselos a los pobres». Esto como una defensa en su cruzada contra la desnutrición infantil. Aunque no especificó cuáles subsidios.
«El número de beneficiarios del bono era de 1.2 millones ahora son 1.4 millones. Es decir, el dinero de los impuestos va en favor de quienes más lo necesitan. Otra obra emblema de mi gobierno es la lucha contra la desnutrición infantil. Ningún gobierno se había preocupado de los niños y de las mujeres gestantes. Por eso la nutrición crónica es del 29%, el más alto de la región», dijo el mandatario.
También se tomó tiempo para criticar la inversión social en el gobierno de Rafael Correa. «El Gobierno de Correa invirtió en promedio en el área social USD 8.100 millones anuales en promedio. Nosotros invertiremos, en promedio, USD 13 mil millones. Es un 60% más y se llenaban la boca en decir que tenían corazones ardientes. Lo que estaban es ardientes de deseo por llevarse el dinero de los ecuatorianos».
Los créditos de las oportunidades
Lasso defendió la entrega de créditos al 1% y 30 años plazo. «Ningún país del mundo da un crédito tan barato con tantas facilidades y convicción sociales. Estos préstamos, en la primera fase, estuvieron dirigidas al agro. 34 mil emprendedores han podido reactivar su negocio o iniciar uno nuevo. Ahora tienen un trabajo y son sus propios jefes. También podrán dar empleo».
Volvió a nombrar, de forma indirecta, a Correa y los créditos. «A diferencia del pasado cuando se le daba crédito al amigo del presidente de turno por USD 40, 50, 30 millones a una sola persona. Están vencidos y muchos no quieren pagar. Ahora nos preocupamos de la base productiva de la sociedad».
En la segunda fase de este crédito estarán los artesanos, productores textiles y de calzado, de confites y lácteos. «Gente sencilla y poco recursos que accederán desde USD 500 hasta USD 5.000 sin trabas básicamente con tu cédula y el certificado de afiliación a la Junta Nacional del Artesano». MIB