Activar la muerte cruzada aún es posible, ¿se irá Lasso?

Apoya a Radio La Calle ($2,00)

por Alisson Guaynalla

Quito, 02 nov (La Calle).– Políticos y expertos consideran la posibilidad de que la Asamblea Nacional active la muerte cruzada para destituir al presidente Guillermo Lasso por su manejo de la crisis interna frente a la ola de violencia que azota al Ecuador.

En junio, por el paro nacional, el Legislativo trató de activar esta carta, pero no logró los 92 votos necesarios para que Lasso salga del poder. Entonces, ya se intentó, pero ¿se puede “otra vez”?

Radio La Calle conversó con dos abogados constitucionalistas y un analista político. Los tres expertos coincidieron con que la Asamblea Nacional sí puede llamar a muerte cruzada, porque la primera vez no se aplicó debido a la falta de votos.

Otra oportunidad

Según el analista político Juan Pablo Jaramillo, el Ecuador está viviendo una crisis política y una gran conmoción interna. Por lo tanto, sería razón suficiente para lanzar la carta de la muerte cruzada. Esta opinión también la comparte el político y abogado Virgilio Hernández, quien manifestó que este mecanismo se debe operar en momentos como los que atraviesa actualmente el país.

“Esa vez no hubo los 92 votos, ni se ha llamado a elecciones anticipadas. Por ende, el mecanismo está vivo”, precisó Jaramillo. “En la crisis de junio se propuso, se votó, pero no se completó los 92 votos. De tal manera que no se aplicó el mecanismo de la muerte cruzada. Y es perfectamente posible poderlo aplicar desde la Asamblea”, coincidió Hernández.

También aclaró que esta acción puede ser aplicada por el Presidente de la República mediante un decreto de disolución. “Pero como él está ocupado en cuidar su puesto no lo va a hacer, mientras el país realmente se desangra”, recalcó.

De igual manera, el jurista Mauro Andino argumentó que se intentó, mas no se aplicó. Para explicarlo de mejor manera, puso otro escenario. Por ejemplo, si el presidente plantea disolver la Asamblea Nacional y hacer posible la muerte cruzada mediante un decreto Ejecutivo, sería ilógico decir que perdió esta capacidad solo porque antes ya hizo el intento de firmar.

Si la Asamblea Nacional decide activar este mecanismo necesitarían 46 firmas, es decir, la tercera parte de los parlamentarios tendrían que estar a favor de elevar la moción. Luego el presidente del Legislativo llama a comparecer en el Pleno al Mandatario para su defensa. Finalmente se necesitarían 92 votos para que se haga efectiva la muerte cruzada.

Los primeros pasos

El jefe de bloque legislativo de Pachakutik (PK), Salvador Quishpe, cuestionó la capacidad del presidente para controlar la crisis de violencia que atraviesa el Ecuador. «La muerte cruzada es inminente», anunció vía Twitter.

Asimismo, dos asambleístas del PK, Mireya Pazmiño y Dina Farinango hicieron un llamado a través de Twitter a sus homólogos para llevar a cabo la muerte cruzada. Por su parte, los legisladores  por UNES, Ronny Aleaga y Mónica Palacios también promovieron la iniciativa.

¿Qué dice la Constitución del Ecuador?

La Constitución habla sobre este mecanismo en los artículos 130 y 148. Ahí se detalla que el procedimiento para una muerte cruzada se da por las siguientes causales:

  • Cuando la otra función, se hubiere arrogado funciones que no le competen;
  • Cuando exista grave crisis o conmoción interna; o,
  • en caso de disolución de la Asamblea Nacional, cuando el Ejecutivo considere que esta obstruye la ejecución del Plan Nacional de Desarrollo.

Además, dicho trámite puede ejecutarse una sola vez y en los tres primeros años de mandato gubernamental. Quien resulta electo luego de la destitución del Presidente o la disolución de la Asamblea, no inicia un nuevo período (4 años), sino que completa el período de la persona cesada del cargo.

La muerte cruzada es la facultad que tiene el Presidente de la República para disolver el Legislativo. Asimismo, es el mecanismo para que la Asamblea Nacional destituya al primer mandatario. El objetivo es renovar estos poderes por las razones antes descritas.

Conmoción interna

El 1 de noviembre se convirtió en una fecha llena de violencia e incertidumbre para Ecuador. Los cinco homicidios policiales, las amenazas de los reos y bandas delictivas, y casi una veintena de atentados en las provincias de Esmeraldas y Guayas, presumen “conmoción interna”.