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Abogado de los padres del teniente Cáceres dice que ellos son “víctimas colaterales”

Quito, 1 de oct, (La Calle).-Según Pichincha Comunicaciones, el representante legal del principal implicado en este caso no justifica el crimen, pero recalca que los padres del uniformado son víctimas colaterales.  

Tras el asesinato de María Belén Bernal, los padres del teniente Germán Cáceres, esposo y principal sospechoso de la muerte de la abogada, reciben constantes amenazas. Édison Burbano, abogado de la familia del uniformado que está prófugo, comentó para diario Extra que ellos son víctimas de acoso desde que se conoció sobre la muerte de Bernal. El representante legal dijo que las puertas de las viviendas de los padres del policía fueron destrozadas. Pero el acoso iría más allá, pues los progenitores de Cáceres -que ya serían adultos mayores- habrían sido amenazados con armas de fuego. Según Burbano, los padres del uniformado serían también víctimas de atropello físico y psicológico. El jurista es consciente de la gravedad del crimen. Incluso eso lo reconoció Jesús López, uno de los abogados de Elizabeth Otavalo, madre de María Belén.  Mientras, Otavalo sufre porque ya no verá más a su hija, la familia de Cáceres lo hace porque está prófugo. El pasado 19 de septiembre, ocho días después de la desaparición de Bernal, Otavalo contó en un canal de televisión que intentó comunicarse con la mamá de Germán, pero que le fue imposible. Por eso, le pidió públicamente que le diga a su hijo que le devuelva a María Belén.

El abogado del policía señaló que el dolor que vive la familia del implicado (que lleva prófugo más de dos semanas) es tan real como la de la madre de la víctima. Burbano dijo que desconoce el paradero de Cáceres a quien lo vio por última vez cuando lo acompañó a rendir una versión libre y voluntaria sobre la desaparición de Bernal, en la Fiscalía. En ese lugar, Cáceres fue retenido por ocho horas con fines investigativos. Luego lo soltaron y se escapó. Días atrás, fueron allanadas las viviendas de los padres y hasta de una hermana de Cáceres, pero de acuerdo a Burbano no hallaron nada. Para el representante legal de la familia del uniformado, ellos son víctimas colaterales de un delito injustificable.