Quito, 12 jun (La Calle).- Paul Carrasco, exgobernador del Azuay, afirmó que el presidente Lasso no tiene palabra, luego de ser removido a tan solo un mes de su cargo. Según él, el mandatario le prometió el puesto hasta terminar el periodo presidencial anticipado.
En entrevista para La Voz de Tomebamba, Carrasco señaló que no fue notificado del cese de sus funciones. Se enteró de su despido por medios de comunicación. Ahora María Consuelo Orellana estará al frente de la Gobernación del Azuay.
“Hasta el día de hoy nadie me ha llamado, nadie me ha informado, nadie me dijo por qué salimos, o si íbamos a salir, o a agradecer”, expresó Carrasco, quien aseguró conocer las razones de esta abrupta decisión.
Sus razones de la remoción
De acuerdo a Carrasco, fue despedido por criticar el trabajo del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP), debido a la falta recursos asignados para mantenimiento de vías. Además, manifestó que su trabajo afectó los intereses de otras autoridades tras haber creado los comités de Seguridad Provincial y de Operaciones Interinstitucionales respecto a la suspensión de operativos de la Policía.
También, nombró a algunos personajes políticos, indicando que son los que forman parte del entorno del presidente, a los cuales les “incomoda” su forma de ejecutar sus funciones.
Carrasco y Lasso
Según él, el mandatario se había comprometido a trabajar a su lado, a pesar de saber que la muerte cruzada se venía. Es por ello que consideró que Lasso le faltó el respeto a él y a la ciudadanía de la provincia.
Autonomía del Azuay
A pesar de la remoción de su cargo, Carrasco propuso armar un modelo de autonomía para Cuenca y Azuay, a través de una Asamblea Constituyente, debido a la estructura del Estado. Esto con el fin de mejorar la economía en la provincia, indicando que lo que se produzca en ella se quede en la misma.
(M.R.R)