Quito, 19 ene (La Calle). – Las autoridades ambientales peruanas y cientos de pescadores alertaron el 18 de enero sobre la contaminación del mar y la fauna en dos áreas naturales protegidas, a causa de un derrame de petróleo.
El derrame se extiende por cuarto día consecutivo en región Callao, costa central del país. Según el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA), el crudo afecta a unos 18.000 kilómetros cuadrados en el mar.
El ministro de Ambiente, Rubén Ramírez, aseguró la noche del martes que el derrame sería de 6.000 barriles de petróleo, y que la multa que podría recibir la subsidiaria de Repsol ascendería a 138 millones de soles, unos USD 35 millones.
Desgracia Ambiental
El incidente se produjo el 15 de enero en una terminal de la refinería La Pampilla, operada por la petrolera Repsol. El Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Sernanp) reportó que el derrame de crudo ha puesto en riesgo la Zona Reservada de Ancón. También parte de la reserva nacional Sistema de Islas, Islotes y Puntas Guaneras.
El lugar es una zona de refugio de aves marinas que producen guano, un abono natural cuya demanda creció en 2021 ante el incremento del precio de los fertilizantes importados.
Grupos de expertos y veterinarios del Servicio de Fauna Silvestre empezaron las labores de rescate de los mamíferos y aves que habitan en las reservas. Las lavaron con detergente antigrasa y las secaron en un ambiente cálido para evitar la hiportemia. Las aves muertas tenían restos de petróleo en los picos, lo que sugiere que consumieron el crudo, lo que causó la muerte.