Samanta Calderón, redactora.
Quito 06 de julio (La Calle). – La Asociación Nacional de Motociclistas del Ecuador prepara una caravana como expresión de protesta a las nuevas disposiciones para la movilidad de las motocicletas en el país.
En una entrevista a Radio La Calle, Darío Paladines, presidente de la Asociación Nacional de Motociclistas del Ecuador (Asomoto) explicó que, no existe un reglamento de tránsito y seguridad vial actualizado, herramienta que debería ir de la mano con las disposiciones vigentes.
“Nos quieren hacer cumplir una normativa que tiene varias ambigüedades en materia de movilidad. A esto, se debe analizar la problemática cultural de violencia que hay en el país entre los diferentes actores viales” así explicó, Paladines.
En el art.284 numeral dos del Reglamento a la Ley de Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial, se menciona que los conductores de motocicletas y similares no podrán circular de forma paralela o rebasar sin cumplir las normas previstas en el Reglamento de circulación vehicular.
Ante esta disposición, varios gremios de motociclistas manifestaron su preocupación por el riesgo que corren. Este sentimiento de intranquilidad también comparte María Sol Olmedo, motorizada independiente. Ella explicó que, “Ahora los accidentes que vamos a notar serán por ‘alcance’. Esto sucederá en el momento que el vehículo no logré detenerse a tiempo. Se nos va a ir encima”.
Operativos
Según la Agencia Nacional de Tránsito, desde enero hasta el 4 de julio realizaron 212 controles, en los cuales se revisó 8532 motos y se citaron a 2748 conductores. Los operativos se intensificaron en junio.
Hasta 2018 se registraron más de 578.000 mil motociclistas en Quito, de los cuales, 65 mil “rodaban” en Pichincha. Esta cifra se cree que ha aumentado durante la pandemia por el aumento de la demanda de comida a domicilio.
Juan Manuel Aguirre, director general de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT), informó que estos controles se harán de manera aleatoria en todo el Distrito Metropolitano de Quito. El objetivo será crear una cultura de seguridad en la ciudad, tanto para motociclistas, como para todos los actores viales.