Por: Daniela Rizzo
Cuando pensamos en literatura argentina, recordamos grandes nombres como Borges o Cortázar. Pero es necesario no olvidar a quienes puede que no sean tan famosos, pero son grandiosos. Uno de estos nombres es Roberto Arlt, quien vivía la escritura como una manera de resistir.
Por eso quiero presentarte este cuento llamado El jorobadito, una narración que se publicó en 1933. Desde prisión, el protagonista nos narra cómo funcionan los barrios bajos de Buenos Aires. Este es un relato que desnuda las capas más violentas y descuidadas de la capital porteña. Tal como nos dice Alrt sobre esta obra: “trabajado por calles oscuras y parajes taciturnos, en contacto con gente terrestre, triste y somnolienta”.
Con un tono jocoso e irónico, el narrador de El jorobadito nos cuenta sin remordimiento que es un asesino. Sus razones no se pueden entender desde la salvación ya que este narrador siempre ha estado en el límite de la moral.
Es muy importante conocer que existen narradores como Roberto Arlt quienes no necesitan inventar personajes o historias ya que sus vidas son tan intensas e interesantes que ya podrían ser una obra de ficción.