Quito, 31 oct (La Calle). – “Bond. James Bond”. Estas tres palabras marcaron la brillante carrera del primer espía del cine, el actor escocés, Sean Connery, quien falleció este sábado a los 90 años.
Hijo de un camionero y una limpiadora, Sean nació en Edimburgo el 25 de agosto de1930. Entre su trabajos antes de ser actor están lechero, marino, pulidor de ataúdes, culturista y modelo.
En 1962 fue elegido para interpretar al elegante espía de las novelas de Ian Fleming. Además de Dr. No, apareció en Desde Rusia con amor (1963), Goldfinger (1964), Operación Trueno (1965), Sólo se vive dos veces (1967) y posteriormente en Diamantes para la eternidad (1973) y Nunca digas nunca jamás (1983). Después de siete entregas, dejó vacante la licencia para matar. Sin embargo, la crítica siempre elogió su trabajo y lo considera el mejor James Bond del cine.
Además del 007, tuvo papeles en El nombre de la rosa como el monje espía William von Baskerville (1986) o Jimmy Malone (1987), el mejor amigo de Elliot Ness en Los Intocables, por el que ganó el Oscar a mejor actor secundario. En 1989 fue el papá de Indiana Jones (aunque solo era mayor a Harrison Ford con 12 años) en Indiana Jones y la última cruzada.
En su honor, brindaremos por su carrera con “un martini seco, agitado, no revuelto”.