Quito, 12 dic (La Calle).- El país enfrentará un nuevo período de “apagón industrial” desde el 15 hasta el 30 de diciembre, según anunció la Cámara de Industrias de Guayaquil. Durante estas dos semanas, las industrias de Alto Voltaje 1 (AV1) y Alto Voltaje 2 (AV2) no recibirán suministro eléctrico, una medida que afecta directamente a la economía del país.
Francisco Jarrín, presidente de la Cámara de Industrias de Guayaquil, confirmó la decisión anunciada por la ministra de Energía, Inés Manzano durante una reunión del Comité Permanente de Energía, el pasado 11 de diciembre. Jarrín expresó su preocupación por las graves repercusiones que esta medida podría tener en el sector industrial, en la economía nacional y el empleo.
“El sector industrial representa el 26% del consumo energético, pero parece ser el único que asume el costo de esta crisis. Esto no es sostenible para la industria, que ya enfrenta altos costos de producción e inseguridad”, señaló Jarrín en una entrevista radial.
Agregó que esta medida no solo afecta a grandes industrias, como las mineras, sino también a pequeñas y medianas empresas que ya enfrentan dificultades por el incremento de los costos energéticos.
La crisis energética y las promesas del Gobierno
El apagón se produce en el marco de la crisis energética que afecta a Ecuador desde inicios de 2024, causada por los efectos del cambio climático y la falta de mantenimiento a la infraestructura de generación eléctrica, según expertos. A pesar de estas dificultades, el presidente Daniel Noboa prometió a los ecuatorianos la culminación de los cortes de luz desde el próximo 20 de diciembre.
De acuerdo a la ministra Manzano, las acciones gubernamentales incluyen la recuperación de 600 MW de capacidad instalada, el arrendamiento de energía en firme y la compra de electricidad a Colombia. Estas medidas, junto con la mejora en las condiciones climáticas garantizarían el suministro continuo.
Además, la ministra destacó iniciativas para diversificar la matriz energética, como la promoción de proyectos solares y el desarrollo de la hidroeléctrica Cardenillo. «Estamos trabajando en un modelo energético más robusto que permita atender las necesidades del país y fomentar la inversión privada», declaró.
Perspectivas económicas
El anuncio del apagón se suma a un panorama económico complicado. Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), se espera que la economía ecuatoriana sufra una contracción del 2,1% en 2024 debido a la crisis energética y la inseguridad.
Además, el gasto en la compra de electricidad a Colombia incrementó la presión financiera, con más de USD 36 millones desembolsados solo en los últimos días de noviembre. Mientras el Gobierno apuesta por sus estrategias para superar la crisis, el sector industrial y los ciudadanos enfrentan un diciembre marcado por la incertidumbre y los desafíos.
