Quito 13 may (La Calle).- Más de 30 organizaciones ambientalistas exigen la renuncia de la ministra del Ambiente, Sade Fritschi, por su falta de capacidad para manejar la cartera de Estado.
Los colectivos argumentaron que la funcionaria tiene desconocimiento del manejo de los temas ambientales, asimismo, de la normativa vigente y que ha utilizado su cargo para beneficiar proyectos privados que atentan contra los derechos de la naturaleza.
En este sentido, solicitaron al presidente Daniel Noboa el nombramiento inmediato de un funcionario con la capacidad y la visión para liderar este Ministerio. No obstante, la secretaria de Comunicación, Irene Vélez, indicó a Teleamazonas que no habrá cambios en el gabinete.
Los desaciertos de Fritschi
El pasado 8 de marzo, Fritschi se reunió con monjes de Nithyananda de Kailasa, un país ficticio. Así lo comprueban estudios del Estado ecuatoriano
La reunión con Nithyananda se dio en medio del sexto período de sesiones de la Asamblea de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente. A lo largo del tiempo, los monjes de este supuesto país engañaron a otros funcionarios por sus participaciones en las sesiones de la ONU.
Según un reporte de BBC News Mundo, Kailasa no es parte de la ONU, ni un Estado real y mucho menos pertenece al territorio ecuatoriano. El gurú “del país” aseguró que compró una isla en Ecuador para fundar la región en 2019. Sin embargo, hasta el momento no hay registros de la compra o la existencia de dicho Estado. Luego de algunos estudios, el Estado ecuatoriano determinó que Kailasa no existe.
Resbalones en la Asamblea
Asimismo en medio de una comparecencia en una de las mesas legislativas, Fritschi titubeó al hablar del presupuesto de la entidad que dirige y supuestas licencias para piscinas camaroneras. El alegato de la funcionaria fue que no es “todóloga“. Además, resaltó que su equipo técnico podría responder de manera acertada a las interrogantes de los legisladores.
“Considero que nadie es todólogo -especialmente en esta sala- en estos temas. Ojalá fuera todóloga. Podría darle el dato exacta en unas horas (…) Si fuéramos todólogas la vida sería más sencilla”, expresó.
No obstante, la cereza del pastel fue su participación en el polémico Caso Olón, en donde otorgó un permiso ambiental a una empresa de la familia presidencial para la construcción de un resort de lujo en una área protegida.