Quito, 7 dic (La Calle).- La vicepresidenta Verónica Abad envió un carta de 17 páginas al presidente Daniel Noboa solicitando aclaraciones respecto a sus funciones como ”colaboradora de la paz” en Tel Aviv, Israel.
El oficio difundido por el periodista Fabricio Vela expone los cuestionamientos de Abad respecto a su designación. El principal está relacionado a su cargo, pues fue nombrada como ”Colaboradora de la Paz” y luego como ”Embajadora de Ecuador en Israel en representación permanente”. En este sentido, la funcionaria preguntó al Mandatario si ejercerá esos dos puestos y que régimen laboral y remuneración salarial aplicaría en su caso.
Argumentó que ambos cargos se constituyen bajo el amparo de dos normas diferentes. El primer caso, un régimen ordinario de ejecución interna del país y por excepción la movilidad al extranjero con el pago de viáticos y gastos de viaje. Por otro lado, el segundo escenario infiere la homologación al servicio exterior en cuanto se trata de una misión diplomática que conlleva el ejercicio del cargo fuera del territorio nacional. Destacó el pago de una remuneración acorde al destino y tablas de compensación que maneja Cancillería.
¿Postergará su viaje?
La carta también puso sobre la mesa el tema de los plazos para que empiece sus funciones en Tel Aviv. Según la disposición del Presidente, Abad debía estar hasta el 10 de diciembre en Israel. No obstante, la Segunda Mandataria aclaró que si el cargo es de embajadora diplomática se debe tomar en cuenta el artículo 123 de la Ley Orgánica del Servicio Exterior que establece lo siguiente:
“Dentro de los treinta días subsiguientes al recibo de la orden de rotación o traslado, el funcionario deberá viajar a la sede de su nuevo cargo por la vía más directa, sin detenerse en el tránsito más del tiempo necesario, salvo autorización u orden expresa del Ministerio de Relaciones Exteriores (…) en consideración a las responsabilidades ulteriores subsecuentes”
Por otro lado, manifestó que deberá ser considerada su situación personal ya que como madre que tiene la tutela de sus hijos. ”Ellos deben permanecer bajo mi cuidado y como tal viajar conmigo, considerando la protección especial del Estado de los menores de edad de conformidad a la Constitución de la República y de esta manera, también evitar mi desintegración familiar”, enfatizó. (AGM).