Quito, 12 nov (La Calle).- Quienes suscribimos, ciudadanas y ciudadanos, partidos, movimientos y organizaciones sociales de Ecuador, horrorizados e indignados ante el HOLOCAUSTO PALESTINO ejecutado por el Estado de Israel y sus aliados guerreristas; el infanticidio que opera sistemáticamente Israel con más de 4.500 niñas y niños asesinados recientemente en Gaza; el enmascaramiento de su crueldad por los grandes emporios mediáticos de su propiedad, convertidos en mortal arma de guerra psicológica y, el apoyo e incentivo entregado por los gobiernos de los Estados Unidos y la Unión Europea a las acciones bélicas en contra de la población civil, para priorizar sus intereses geopolíticos sobre la vida de un pueblo y una nación, no vamos a guardar silencio y expresamos:
- Nuestra firme condena al Estado sionista de Israel, a su régimen de apartheid, a su actual jefe Benjamin Netanyahu y sus tropas. El ya conocido plan de limpieza étnica antisemita (el pueblo palestino es semita) que ejecuta Israel en estos momentos, su interés de expulsara 2.4 millones de palestinos gazatíes al desierto egipcio del Sinaí no tiene ninguna relación con“el rescate de rehenes” y es parte del plan macabro para la consolidación del denominado “Gran Israel”, bajo la dirección de la corriente política sionista israelí y del Complejo Militar Industrial de Estados Unidos, para apropiarse del gas existente en la región y, fundamentalmente, para crear un caos global del que salgan beneficiadas las élites gobernantes de Estados Unidos y sus países satélites, con el control del Cercano y Medio Oriente.
- Nuestra demanda de INMEDIATO CESE AL FUEGO Y RETIRO DE LAS TROPAS INVASORAS que permitan abrir corredores humanitarios para salvar vidas y dotar de agua, alimentos, medicinas, combustible y electricidad a Gaza, uno de los territorios con mayor densidad poblacional del mundo, cuya mitad de habitantes son niños y niñas, y que está devastada como en su tiempo el Ghetto Judío de Varsovia por las tropas nazis en mayo de 1943. Junto a tal demanda, repudiamos el uso de armas prohibidas como el fósforo blanco, el ataque a hospitales, campos de refugiados y lugares religiosos. Destacamos el inexcusable incumplimiento del Derecho Internacional Humanitario, al atacar indiscriminadamente a la población civil tomando en cuenta su ventaja militar, así como el privar a millones de personas, la mitad de ellas niños y niñas, de agua, alimentos, electricidad, medicamentos y combustibles, lo que nos lleva a exigir un juicio, ante la CORTE PENAL INTERNACIONAL (facultada para ejercer su jurisdicción sobre personas respecto de los crímenes de lesa humanidad), a Benjamin Netanyahu, actual Primer Ministro Israelí y atodos los altos mandos políticos y militares que alentaron y practicaron el tipificado delito de Genocidio, como establecieron las Naciones Unidas en 1948.
- Reconocemos la actitud valiente y humanista del señor Secretario General de la ONU Antonio Guterres, de dignatarios de la mayoría de países a nivel global y de millones de hombres y mujeres que elevan su voz de protesta exigiendo el fin del horror y el terror al que está sometida la población sobreviviente de Gaza. Pedimos a la Organización de Naciones Unidas que, dentro de sus competencias, entregadas por los pueblos del mundo para la Paz, obligue a que el Estado de Israel ponga fin a este apocalíptico episodio que replica, en el siglo XXI, el HOLOCAUSTO de mitad de siglo pasado.
- Finalmente, el gobierno ecuatoriano entrante debe respetar la tradicional posición diplomática ecuatoriana de poner fin a este conflicto con una paz justa y duradera que obliga a respetar el derecho del pueblo palestino a su libre autodeterminación y a consolidar su propio Estado, independiente y soberano, dentro de las fronteras anteriores a 1967; es decir, como lo hizo Ecuador en la última votación en la Asamblea General de Naciones Unidas, de acuerdo al mandato de la Constitución de la República.
Llamamos a nuestro pueblo, que un día defendió, acogió y acompañó a las víctimas de los genocidios cometidos en la II Guerra Mundial, a movilizarse hoy en defensa del pueblo palestino y de sus niñas y niños.